Inma Castillo
Empresarios del sector turístico exponen retos y oportunidades de la provincia
Se relacionan potencialidades y desafíos a los que se enfrenta el turismo en Jaén con una creciente baza a través del oleoturismo y el consolidado patrimonio de Úbeda y Baeza
Las instalaciones de Caja Rural de Jaén en Ifeja fueron el escenario para hablar de turismo en la segunda sesión de esta nueva edición de los Encuentros ‘Jaén en Futuro’, promovidos por IDEAL y Caja Rural de Jaén. Con un formato renovado, en esta ocasión los encuentros abordan temáticas y reúnen a colectivos profesionales, una forma de hacer una radiografía de la realidad de la provincia, en este caso a nivel turístico y de lo que supone esto para la economía. En la mesa de debate se sentaron Carlos Guirao y Luis Carlos Martínez, presidente y gerente de la Asociación de Empresas de Alojamientos, Campings, Servicios Turísticos y Culturales, Turismo Activo y de Ocio de la provincia de Jaén. Asimismo, acudió Sebastián Moreno, gerente de Pópulo Servicios Turísticos, de Baeza; Manuel Peñas, director del hotel Ciudad de Úbeda, y Vicente Martínez, representantes de la Caja Rural de Jaén. El debate estuvo moderado por el delegado de IDEAL Jaén, José Luis Adán. La mesa de debate ofreció una buena perspectiva del sector turístico en la provincia. Todos coincidieron en el gran potencial que tiene y confían en su buen ritmo de crecimiento. El oleoturismo y el patrimonio, de la mano, están llevando por buen camino al turismo de Jaén. Señalando los retos a afrontar, los participantes en el encuentro ofrecieron una buena retrospectiva y señalaron las claves para su desarrollo.
Tomó la palabra en primer lugar Vicente Martínez, director de la Caja Rural urbana 16 de Jaén. Señaló que desde Caja Rural quieren poner en valor a aquellas empresas, instituciones y personas que son ejemplo de lo mejor que se hace en la provincia. «En estos encuentros queremos generar un espacio de diálogo dinámico y constructivo en el que podamos compartir experiencias, analizar retos y trazar juntos oportunidades de futuro». Añadió que el sector del turismo es una actividad clave para diversificar la economía y proyectar la imagen de Jaén más allá de nuestras fronteras. Creen firmemente en la importancia de trabajar unidos, de compartir ideas y usar proyectos colectivos. «El turismo, al igual que el olivar, forma parte de nuestra identidad y puede convertirse en una palanca de desarrollo económico y social de primer nivel si somos capaces de apoyarlo, modernizarlo y darle la visibilidad que merece», apuntó el representante de Caja Rural de Jaén. Su vocación es ser más que un banco, quieren ser un aliado estratégico de desarrollo en la provincia.
Oportunidad
Por su parte, Carlos Guirao dio su visión de la situación del turismo en la provincia y lo relacionó con el producto estrella jienense: el aceite de oliva. «Creo que en el oleoturismo tenemos una oportunidad muy buena que hemos empezado a explotar hace relativamente poco». A lo que añadió Sebastián Moreno, que ofrece servicios turísticos a través de su empresa Pópulo, que el oleoturismo lleva dos décadas pero que la evolución ha sido lenta. «Pero desde hace seis o siete años se está convirtiendo en un producto turístico imprescindible en la provincia porque se está entrando en proyectos muy interesantes y cada vez se ve más apoyo de las administraciones», apostilló Moreno. A lo que añadió que el oleoturismo va a ser una de las ‘patas’ fundamentales de la provincia junto a los parques naturales y renacimiento. «Creo que ha llegado el momento de creerse que es un producto muy potente y en el que podemos ser totalmente diferentes y aportar mucho a la actividad turística de la provincia». En el tema de oleoturismo, Carlos Guirao aseguró que le gusta compararse con provincias que van mejor que la nuestra. Así habló del papel que juega el vino en La Rioja y lo comparó con lo que se puede hacer aquí con el aceite. «Estamos jugando con todas las patas turísticas de la provincia y no estamos sabiendo explotar casi ninguna». Señaló que se ha ligado la oferta turística al tema de la cultura y, por ejemplo, se logró que Úbeda y Baeza se convirtieran en ciudades Patrimonio de la Humanidad, lo que ha repercutido en grandes resultados turísticos, «pero hemos abandonado las otras dos patas que son el oleoturismo y los parques naturales», expresó Guirao.
En cuanto a los datos que recogen desde TurJaén, centrándose en los hoteles, Guirao aseguró que hay un dato que es demoledor, el de la rentabilidad por habitación construida, tiene en cuenta el precio medio de venta y el porcentaje de ocupación. Esto da un dato de 28 euros en la provincia, mientras que el de Málaga está en 87 euros y el de Sevilla, por ejemplo, en 90. «Todos los años los hoteles de la provincia pierden competitividad con el resto de hoteles. Nuestras habitaciones son la mitad de rentables ya que los costes son los mismos». Esto hace que los hoteles del resto de provincias, año a año se vayan modernizando y los de Jaén no. Para combatir eso, Guirao aseguró que la solución pasa por lograr traer mucho más turismo, un turismo de más calidad que esté dispuesto a dar más por el destino. «El turismo internacional está más dispuesto a pagar precios más altos. Es una estrategia a muy largo plazo para una problemática que llevamos años arrastrando». En contraposición, somos la provincia mejor valorada de Andalucía en cuanto a puntuación de visitantes por el buen trato de los trabajadores.
En cuanto a los servicios turísticos, Sebastián Moreno habló de la situación en la que se encuentran y señaló el problema de la estacionalidad. Además señaló la falta de personal cualificado para la profesión, para ejercer de guía. Además de lo que suponen los Free Tour, la oferta gratuita o de pago inverso. «Es una moda y está en todo el mundo pero al final resta calidad al servicio», sentenció Moreno. Otra cosa que afecta mucho es la descoordinación que hay en los transportes públicos. En este aspecto Carlos Guirao también destacó el estado de las carreteras con los tres accesos principales, la carretera de Levante, la de Madrid y la de Córdoba en mal estado. Es el eterno problema del que se quejan en todos los sectores, las malas comunicaciones que tiene Jaén. «Mejoran las comunicaciones y Jaén sube como la espuma», añadió Manuel Peñas, director del hotel Ciudad de Úbeda.
Uno de los puntos clave del turismo en Jaén es la ciudad de Úbeda. Para la misma ha supuesto un gran revulsivo el ser nombrada Patrimonio de la Humanidad. En este sentido, Manuel Peñas aseguró que en la provincia se está haciendo muy bien, «porque Jaén no era nadie hace unos años y ha cambiado todo gracias al patrimonio». Peñas también habló de lo negativo que es para Úbeda y para la provincia en general la insistencia desde los medios de comunicación en las altas temperaturas, porque afecta negativamente al turismo en esta época, que ya de por si es la más baja del año en cuanto a visitantes. «Como sigamos vendiendo la ola de calor y los 40 grados en verano, el norte de España va a ser la nueva Costa del Sol dentro de 15 años», sentenció Peñas. Por otro lado, en Úbeda todos los fines de semana hay actividades de todo tipo y para todas las edades, lo que puede suponer también un atractivo para el turismo, que se mueva hasta aquí para estas actividades y ya aproveche para visitar la ciudad. «Tenemos que aprender porque no sabemos gestionar todo este volumen de turismo y va a subir, eso no va a parar», aseguró Manuel Peñas.
Coordinación
Asimismo, la mesa de debate coincidió en que falta coordinación para organizar bien las actividades y el turismo que general. En este sentido, Sebastián Moreno apuntó a la necesidad de crear algún tipo de «ente o patronato entre las ciudades de Úbeda y Baeza que trabajen conjuntamente para gestionar las ayudas que vienen a ellas en concreto».
En esta línea, se puso sobre la mesa de debate la pregunta de si se está haciendo una buena promoción de lo que realmente se quiere dar a conocer. En este sentido, Carlos Guirao volvió a incidir en que en Jaén no se debe apostar solo por una cosa. «En Jaén se ha apostado muy bien por el tema de cultura y de patrimonio, pero deberíamos aumentar mucho más nuestra promoción». Y en este sentido aseguró que «se improvisa» y que no se tiene una visión a medio o largo plazo de estrategia de promoción en ninguna de las vías de turismo que ofrece la provincia. «Veo muy buena la vía que se está tomando ahora con el oleoturismo, la de patrimonio si lleva avanzando muchos años y han venido cosas muy buenas para la provincia. Y tenemos mucha oportunidad en tema de promoción y turismo porque falta mucho por explotar». En este punto también aludieron a la falta de coordinación entre ciudades y pueblos, señalaron que deberían ir a una cuando se trasladan a ferias de turismo, dejar la política a un lado y vender juntos la provincia de Jaén. En este sentido, Luis Carlos Martínez, gerente de TurJaén, señaló la necesidad de que cada pueblo explote sus valores para contribuir al conjunto de Jaén. «Los 97 pueblos de Jaén no pueden ser destino turístico, porque nos perdemos. Las administraciones tienen que impulsar el potencial de cada pueblo, pero todos no pueden ser destino turístico porque sino la gente que venga ya no sabe ni donde ir».
Concluyó el encuentro con un sabor positivo recalcando la amabilidad del sector turístico en Jaén. «Nosotros tenemos fama de ser un destino turístico muy empático, no solo por los profesionales del sector turístico, sino por la ciudadanía en general. Y no lo digo yo, lo dicen las encuestas», señaló Luis Carlos Martínez. Hay un punto en cuanto a la gastronomía muy positivo en la provincia, «y es que el gasto medio del cliente es elevado precisamente a que gastan mucho en gastronomía», señaló Guirao. «Aquí la gente va buscando el aceite y el producto típico de la provincia», añadió Moreno.
Retos con los que se encuentra el turismo en Jaén
En la mesa de debate se puso el foco en las potencialidades del sector turístico de la provincia, pero también se habló de las trabas con las que se encuentra y los retos a superar. Un factor que está influyendo en el sector turístico en Jaén, al igual que en otras partes del país, son los pisos turísticos. Cuando comenzó hace muchos años lo llamaban economía social, la gente tenía el piso de algún familiar y le permitía sacar un dinero extra a su economía y además aportaba un mayor número de camas a la ciudad, incluso en destinos en los que no había plazas hoteleras. Sacaron una normativa en la que no había muchas exigencias para el propietario. Así empezó a aumentar el número de pisos turísticos. «Llega un momento en el que la cosa se colapsa, sobre todo en ciudades muy turísticas como Málaga», señaló Luis Carlos Martínez. Con este auge, aumentan las exigencias para poder tener un piso turístico. «El problema es que en un porcentaje muy alto, las personas que explotan este tipo de viviendas no son empresarios del sector turístico, con el perjuicio que esto supone para los que si lo son. Es una competencia un poco desleal, aunque nunca hemos estado en contra si la norma lo permite». Surge la duda de cuál habría sido el panorama si no hubiesen aparecido los pisos turísticos, es decir, si se podrían haber creado más hoteles. En ciudades tan turísticas como Úbeda y Baeza hace más de 10 años que no se construye un hotel. Carlos Guirao aseguró que haciendo números no es rentable. «Aunque haya necesidad, cuando una cadena hotelera hace números para implantar un hotel en la capital, no le salen las cuentas», apostilló. Y otro tema es que los pisos turísticos no generan empleo y muchos de ellos están implantados de forma ilegal.